Las motos eléctricas en Valencia

motos valencia

Es probable que hayas visto que las motos eléctricas en Valencia son un medio de transporte en auge, debido al gran ahorro que ofrecen al funcionar con un gasto de combustible inexistente. Asimismo, este tipo de motos son perfectas para moverse con facilidad por la ciudad ya que es muy sencillo llegar de una forma rápida y segura a casi cualquier lugar.

Este medio de transporte se irá haciendo hueco en la movilidad urbana con el paso del tiempo. Es por esta razón que es necesaria la presencia de diversos puntos de recarga para motos eléctricas en Valencia, repartidos por toda la ciudad. Las motos eléctricas además de ser respetuosas con el medio ambiente, ofrecen a sus usuarios interesantes ventajas.

Valencia: una ciudad ideal para moverse en moto eléctrica

La ciudad de Valencia es un lugar perfecto para utilizar las motos eléctricas como medio de transporte. Se trata de una urbe que posee calles rectas con escasas pendientes, así que no es necesario moverse en un vehículo con un motor demasiado potente.

El clima es otra característica que convierte a Valencia en una ciudad idónea para utilizar una moto eléctrica. En otras urbes donde suele llover o hace mucho frío, la idea de viajar en moto no resulta muy agradable, ya que hay días en los que no puede utilizarse, o se convierte en algo realmente incómodo.

En Valencia esto no pasa gracias a su clima mediterráneo, las épocas frías son muy suaves y suele llover muy poco. De este modo, circular en moto eléctrica es más sencillo, cómodo y puede usarse todos los días del año.

En los últimos años, las motos eléctricas en Valencia han aumentado su presencia, y el Ayuntamiento de la ciudad ha ido creando más espacios para ellas. En las áreas más congestionadas, como el centro urbano, se ofrecen aparcamientos especiales. Pensando en cada uno de los modelos de motos eléctricas en Valencia, se facilitan cargadores bien distribuidos por las diferentes zonas de la ciudad. 

Puntos de recarga de motos eléctricas en Valencia

En la actualidad, en la ciudad de Valencia se puede encontrar una extensa red de cargadores para uso de las motos eléctricas. En Valencia se ponen a disposición de los usuarios más de 730 estaciones de recarga para vehículos eléctricos. 

Las motos eléctricas en Valencia cuentan con unos 140 puntos de carga, la mayoría ubicados en el centro de la ciudad. No obstante, también hay estaciones de carga para motos en los alrededores de la ciudad, en centros comerciales y en aparcamientos.

La mayoría de cargadores que se pueden encontrar para motos eléctricas en Valencia son de Tipo 2, o también conocido como Cargador Mennekes. Este tipo de cargador es el más utilizado en coches y motos eléctricas porque permite que la batería se cargue en un breve periodo de tiempo. 

En Valencia se encuentran disponibles otro tipo de cargadores como Schuko o CCS2. Los primeros son los enchufes normales que puede tener cualquier electrodoméstico en casa, mientras que los segundos combinan la posibilidad de cargar con corriente continua o alterna.

La ciudad de Valencia fue la primera en introducir puntos de carga eléctricos colocados en pérgolas fotovoltaicas y farolas. De esta forma, se aprovecha la infraestructura de conexiones eléctricas ya instaladas.

Cómo se recarga una moto eléctrica

Cargar una moto eléctrica es muy sencillo, únicamente hay que encontrar el punto de carga más cercano. En la actualidad hay varias aplicaciones para móviles que ayudan a encontrar las estaciones de carga más próximas. 

El proceso de carga es muy sencillo, simplemente se ha de unir al conector de la moto el cable que se quiera utilizar, ya sea Tipo 2, Schuko o CCS2. El punto de carga de la batería se encuentra conectado a la red eléctrica, generalmente gestionada por Iberdrola.

Los puntos de recarga pueden ser de pago o gratuitos. Los cargadores de pago se pueden utilizar con aplicación de móvil, tarjeta de crédito o una tarjeta especial de carga. Asimismo, hay puntos de recarga públicos, y en algunos centros comerciales o supermercados se emplazan áreas de recarga gratuitas.

El tiempo de carga de una moto eléctrica desde una instalación externa depende de varios factores como la capacidad de la batería o la potencia del cargador. Del mismo modo, es importante el nivel de carga que tenga la batería en el momento de conectarse. Normalmente, una carga completa requiere de unas cuatro horas.

Ventajas y desventajas de tener un moto eléctrica en Valencia

Como ocurre con los turismos eléctricos, las motos eléctricas son una auténtica revolución en lo que se refiere a la movilidad por ciudades. No obstante, es interesante conocer cuáles son las ventajas y desventajas de circular con motos eléctricas en Valencia. Las ventajas son las siguientes:

  • Mínimo mantenimiento. Las reparaciones suelen ser más limpias y no necesitan de un cambio de aceite.
  • Las motos eléctricas no tienen combustible, por lo que los olores son agua pasada.
  • El ahorro económico es considerable. Llenar el combustible supone un gasto superior que cargar la batería.
  • Su eficiencia es mayor al disponer de menos componentes, hay más espacio y se aprovecha toda la energía para el movimiento.
  • El ruido que hace una moto convencional es bastante notable. Sin embargo, las motos eléctricas son silenciosas.
  • Nula emisión de gases a la atmósfera, por lo que este tipo de motos ayudan a cuidar el medio ambiente.
  • Algunos ayuntamientos ofrecen bonificaciones en el Impuesto Municipal de Circulación para aquellos usuarios de motos eléctricas.

Existen una serie de desventajas en las motos eléctricas, que se irán corrigiendo poco a poco con el paso del tiempo. Son las siguientes:

  • Los puntos de carga pueden ser en ocasiones difíciles de encontrar. Sin embargo, las ciudades se van adaptando de manera gradual al vehículo eléctrico.
  • La velocidad de las motos eléctricas es menor que la de una moto convencional de combustible.
  • El precio de este tipo de moto suele ser más elevado que el de una moto tradicional
  • La autonomía de una moto eléctrica es un poco limitada y por eso es recomendable su uso en ciudad o para distancias cortas.
  • Las baterías se tienen que cambiar de vez en cuando porque van perdiendo capacidad, sobre todo en las épocas de frío.
  • El tiempo de carga de una moto eléctrica es superior al tiempo que se utiliza para llenar de combustible el depósito de una moto convencional.
  • El silencio de este tipo de motos puede llegar a ser un problema a la hora de circular, puesto que los peatones podrían no escucharla y producirse un accidente.

También puedes visitar la situación y usos de motos eléctricas en Barcelona desde aquí.

Comprar una moto eléctrica con el Plan MOVES III

plan moves iii

¿Qué es el Plan MOVES III?

El Plan MOVES III fue anunciado por el Gobierno español en abril de 2021 y contempló en un primer momento la destinación de 400 millones en subvenciones para todos aquellos que quisieran adquirir un vehículo eléctrico.

Para acceder a estas ayudas es preciso cumplir los requisitos establecidos que detallaremos en este post.

Fue en abril de 2021 cuando la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, comunicó la entrada en vigor del Plan MOVES III. De esta manera, el Estado decidía invertir 400 millones de euros en forma de ayudas a la compra de vehículos eléctricos, híbridos enchufables y motos eléctricas, y a la instalación de puntos de carga.

Dada la estupenda acogida que tuvo este programa de incentivos desde su puesta en marcha, el Gobierno sumó pocos meses después otros 400 millones de euros al plan inicial.

Nuevamente, en diciembre de 2022, el Gobierno español comunicó oficialmente que ampliaba una vez más las ayudas para la movilidad sostenible contempladas en el Plan MOVES III.

A ello contribuyó la solicitud de 15 comunidades autónomas en las que se había tramitado casi 100 000 solicitudes de esta bonificación. Es decir, se ha pasado de los 400 millones de euros iniciales a los 1200 millones actuales. El objetivo permanece inalterable: incentivar la compra de vehículos eléctricos y la expansión de la infraestructura de recarga. Este plan de subvenciones es gestionado por el Instituto para Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE).

Plan MOVES III: requisitos y cuantía de la subvención para comprar motos eléctricas

El Plan MOVES III es sin duda el programa de ayudas destinado a la adquisición de vehículos eléctricos más ambicioso hasta el momento del Gobierno español. En concreto, este programa de bonificaciones concede subvenciones de hasta 1300 euros para la compra de motos eléctricas. A continuación, pasamos a explicarte detalladamente todos los requisitos que has de cumplimentar para acceder a ellas.

En lo que respecta al tipo de motos eléctricas contempladas en este programa de subvenciones estatales, al igual que ya preveía el Plan MOVES II, se quedan fuera de este paraguas de ayudas las motos eléctricas con una potencia nominal por debajo de los 3 kW, es decir, 4,02 CV. Y, aunque parezca obvio, cabe explicar que es obligatorio que las motos eléctricas estén impulsadas única y exclusivamente por motores eléctricos.

Esta es la razón por la que los ciclomotores eléctricos se quedan fuera del Plan MOVES III. Una medida, ante todo desconcertante, pues se trata de un vehículo esencial (y más asequible para el ciudadano medio) a la hora de electrificar las ciudades. Asimismo, la demanda de estos vehículos aumenta sin cesar, especialmente si tenemos en cuenta los servicios de motosharing que funcionan en las grandes urbes. En pocas palabras: los ciclomotores eléctricos (categorías L1e y L2e) son una vez más los grandes marginados de este programa de ayudas estatal. 

La autonomía es otro factor fundamental: únicamente se podrá solicitar la subvención para comprar una moto eléctrica nueva siempre y cuando que la autonomía sea igual o superior a 70 km. La autonomía de la batería se determina a partir de una carga completa. 

Si se quiere comprar una moto eléctrica con una potencia igual o superior a 3 kW (categorías L3e, L4e, L5e), la subvención ascendería a 1100 euros para motos de las categorías L3e, L4e y L5e. Esta ayuda puede alcanzar los 1300 euros si en el proceso de adquisición el comprador entrega una moto con más de siete años de antigüedad. Es decir, en lo tocante a las motos eléctricas, la entrega o no de otro vehículo para su posterior achatarramiento implica una diferencia de 200 euros en la subvención.

Plan MOVES III: cómo acceder a las ayudas a la compra de motos eléctricas

El Plan MOVES III también ha fijado un límite de compra para la moto eléctrica nueva, al igual que también se hizo con los híbridos enchufables y con los coches eléctricos. Ese máximo se ha establecido en los 10 000 euros sin IVA. En términos prácticos, esto se traduce en que cualquiera podrá acceder a una subvención para comprar una moto eléctrica nueva cuyo precio de venta al público no supere los 12 100 euros.

Y eso no es todo, pues la bonificación puede ampliarse un poco más –exactamente, en un 10 %– en caso de que el solicitante resida en algún municipio con menos de 5000 habitantes. De cumplirse este requisito, la ayuda podría ampliarse hasta los 1210 euros si no se entregase una moto vieja a cambio, o de 1430 cuando se entregue una moto para su posterior achatarramiento. Igualmente, esta bonificación también se aplica cuando la moto eléctrica sea para transportar a una persona con capacidades diferentes o si está destinado a VTC o taxi.

Cabe señalar que las PyME y las grandes empresas también pueden beneficiarse de las ayudas del Plan MOVES III para comprar motos eléctricas. La cuantía de la bonificación para una PyME sería de 950 o 900 euros (con o sin entrega de otra moto antigua, respectivamente), mientras que para una gran empresa hablaríamos de 750 o 700 euros, basándonos en los mismos criterios.

Otras particularidades del Plan MOVES III para la compra de motos eléctricas

Llegados a este punto, y a título meramente informativo, cabe especificar que las ayudas estatales para la adquisición de un coche eléctrico, por su parte, pueden alcanzar los 7000 euros –siempre y cuando se cumplan los requisitos necesarios para ello: que el precio del coche nuevo no supere los 45 000 euros sin IVA, entregar un vehículo con más de siete años de antigüedad a cambio a nombre del comprador, etc.

En cualquier caso, es preciso aclarar que la subvención para comprar una moto eléctrica no es automática; es decir, no se aplica directamente durante el proceso de compra. Para que esta ayuda sea efectiva, es fundamental que cada interesado la solicite formalmente en la comunidad autónoma en la que vive. Este requisito también se contempla en la adquisición de vehículos eléctricos e híbridos enchufables.

En lo tocante a los impuestos, es conveniente que sepas que tienes la obligación de añadir este tipo de subvenciones en tu próxima declaración de la renta. Esto es así porque se trata de una ganancia patrimonial, y por lo tanto ha de incluirse en la base imponible general del IRPF.

En cualquier caso, siempre tributará atendiendo a la situación personal y familiar, y a los ingresos de cada contribuyente. De todos modos, si se recibiese algún tipo de descuento por parte del concesionario o fabricante, dicho descuento no tributaría en este tipo de impuesto.

Más información aquí.

Motos eléctricas en Barcelona y puntos de recarga

motos eléctricas en Barcelona

Seguramente las motos eléctricas en Barcelona sean el medio de transporte que más se utiliza. Bien por su facilidad a la hora de conducirlas o por el nulo gasto que se tiene en combustible, la verdad es que este tipo de motos han conseguido hacerse un hueco, especialmente en el segmento de las scooters

Esto lógicamente conlleva que sea necesaria la existencia de puntos de recarga cercanos, tanto para coches como para motos eléctricas. Y en el caso concreto de Barcelona, cabe decir que es una de las ciudades dónde más fácil resulta encontrarlos. 

¿Qué es un punto de recarga para las motos eléctricas? 

Lo primero que hay que conocer es qué significa este concepto exactamente.

Pues bien, un punto de recarga para motos eléctricas es, básicamente, un dispositivo que ha sido diseñado para recargar la batería empleada por este vehículo para poder alimentar su motor. Está formado por: 

  • Una estructura rectangular de aproximadamente unos 150 centímetros de altura. 
  • Una pantalla táctil que permite la selección del tipo de carga deseada y de su potencia. 
  • Un lector para tarjetas bancarias con las que realizar el pago u otro sistema parecido. 
  • Una manguera larga con el conector de carga en su extremo. 

Como se puede deducir, ni el modo de funcionamiento ni la apariencia de los puntos de recargas para las motos eléctricas en Barcelona difiere mucho del de un surtidor de combustible. 

Puntos de recarga de motos eléctricas 

Hoy en día, en la Ciudad Condal existen casi 500 puntos de recarga para vehículos eléctricos y aproximadamente 150 de estos son exclusivamente para las motos eléctricas. Cada uno de ellos puede llegar a dar cobertura hasta a 8 motos de manera simultánea.

Endolla Barcelona es la red encargada de gestionar el servicio municipal de recarga de vehículos eléctricos y se utiliza de manera muy sencilla.

Puntos de regarga para motos eléctricas en Barcelona
Fuente: Endolla Barcelona

Simplemente hay que registrarse en su web o en la app móvil y solicitar una tarjeta identificativa que se vinculará al vehículo.

A partir de ahí solo queda empezar a disfrutar de sus puntos de recarga que están presentes tanto en la vía pública como en aparcamientos subterráneos.

Esta aplicación además tiene un sistema de localización que permite que el usuario pueda saber dónde están las gasolineras eléctricas más cercanas, así como la disponibilidad en tiempo real de los dispositivos.

Todos ellos se encuentran disponibles las 24 horas del día.

Cómo se recarga una moto eléctrica en Barcelona

En lo que se refiere a la manera de recargar una moto eléctrica resulta todo muy sencillo.

Lo primero que hay que hacer es buscar en el mapa de la app o en la propia web de Endolla el punto más próximo de recarga.

Este se puede seleccionar incluso con 20 minutos de antelación. Una vez en el lugar elegido, se deberá escanear desde la aplicación el código QR situado en el punto de carga.

cargar motos eléctricas barcelona

Ahora ya llega el momento de enchufar la moto con el conector correspondiente y seleccionar la opción “inicio de recarga”.

Solamente queda esperar a que esta se lleve a cabo.

Cabe mencionar, que los conductores de motos eléctricas también se pueden descargar otras aplicaciones destinadas a buscar puntos de recarga, no solamente en este destino, sino en prácticamente cualquier lugar del mundo.

¿Cuánto puede costar cargar la batería de las motos eléctricas?

Aunque la movilidad eléctrica se está convirtiendo en la mejor opción de transporte, no solamente por la nula contaminación acústica y ambiental que emiten las motos eléctricas, lo cierto es que recargarlas no es algo que salga completamente gratis, pero sí bastante económico.

Suscripción a EcoMoto

Antes de nada, tendrás que hacerte con una suscripción anual a EcoMoto. Puedes hacerlo por tan solo 12,5 € si te unes antes del 31 de diciembre de 2023.

Un 50% de descuento del precio original de 25€.

Precios de Recarga

Vamos a tomar como ejemplo la SK3, con una potencia de 6.200W, lo que es equivalente a 6.2 kWh.

Esto es lo que pagaríamos en Barcelona con el servicio EcoMoto de Endollat por cargarla por completo.

En Aparcamiento BSM:

  • Diurno (0.27 €/kWh):: Cargar tu SK3 te costará 1,67 €.
  • Nocturno (0.21 €/kWh):: Si prefieres hacerlo por la noche, el precio es aún más bajo: 1,36 €.

En la Calle:

  • Diurno (0.30 €/kWh): Cargar en plena calle durante el día tiene un precio de 1,86 €.
  • Nocturno (0.35 €/kWh): Y por la noche, 1,55 €.

No olvides que existe una tarifa mínima de recarga de 0,20 €, independientemente de la energía consumida.


Resumen de Precios

UbicaciónMomentoPrecio €/kWhPrecio Carga SK3
Aparcamiento BSMDiurno0.27 €1,674 €
Aparcamiento BSMNocturno0.22 €1,364 €
CalleDiurno0.30 €1,860 €
CalleNocturno0.25 €1,550 €

Ahora que ya sabes dónde puedes encontrar tu punto de recarga para motos eléctricas en Barcelona, sabes cómo usarlos y lo tipos que existen.

Esperamos que, si no lo has hecho todavía, te decantes por este medio de transporte para poner tu granito de arena y ayudar a cuidar el medio ambiente.

10 cosas que quizá no sabías sobre las baterías de las motos eléctricas

batería de motos eléctricas MCR-S

El Plan MOVES III está motivando a muchos usuarios a apostar por la movilidad eléctrica. Es cierto que las ventas de coches híbridos y 100 % eléctricos han crecido notablemente durante los últimos años, pero las cifras no se acercan ni remotamente a las ofrecidas por las motos eléctricas. Al fin y al cabo, estas ofrecen un mejor rendimiento en trayectos urbanos, que son los realizados con mayor asiduidad por los conductores en su día a día.

Ahora bien, hay un elemento que llama la atención de todos los interesados en comprar una motocicleta eléctrica. Hablamos, cómo no, de sus baterías, que son las responsables de determinar la autonomía (número de kilómetros realizados por cada carga completa) del vehículo. Por ello, aquí queremos hablar de aquellos aspectos más importantes que no son de dominio del público general. Presta atención.

1. Las baterías son sistemas antirrobo

La mayoría de scooters eléctricos, es decir, aquellos que ofrecen prestaciones similares a un ciclomotor y alcanzan una velocidad máxima de 45 km/h, utilizan una batería extraíble para alimentar el motor. De hecho, para poder recargar su autonomía, es necesario que el conductor la suba a su propia casa.

Como es evidente, una vez que se retira la batería, el vehículo no arranca. Por ello, en caso de no contar con un parking privado y tener que aparcar asiduamente en la calle, las motos eléctricas con baterías extraíbles son la mejor opción. Nadie podrá llevársela.

2. Se cargan en casa

Continuamos hablando de las baterías extraíbles, que actualmente son las más populares del mercado. En este caso, el usuario puede cargarlas en su propia casa usando un enchufe convencional y un cargador similar al empleado para restaurar la autonomía de su teléfono móvil.

Esto no solo resulta muy cómodo, sino que también permite ahorrar dinero. ¿Cómo? Pues evitando que el conductor tenga que instalar un punto de carga para vehículos eléctricos o utilizar los disponibles en la vía pública o en las electrolineras. Además, el precio del kWh en el hogar es mucho más económico que en estos lugares.

3. Apenas necesitan mantenimiento


En un principio, las baterías de plomo eran las más habituales en las motos eléctricas. Sin embargo, con el paso del tiempo, la batería de iones de litio ganó terreno por su mayor capacidad para almacenar energía, su menor peso y su vida útil más prolongada.

Eso sí, para que se mantenga en buen estado el mayor tiempo posible, hay que tener una serie de consideraciones en cuenta. Por ejemplo, una vez que la batería de iones de litio de un scooter eléctrico llega al 100 % de su autonomía, hay que desconectarla del cargador. Asimismo, nunca se debe dejar que su nivel de carga descienda por debajo del 15-20 %.

Si no tienes en cuenta estos consejos, el rendimiento a medio y largo plazo de la batería se verá perjudicado.

4. Tienen muchas vidas útiles


Los opositores a las motos eléctricas siempre han alegado que las baterías, una vez que llegan al final de su vida útil, generan una cantidad de residuos similares a los derivados de la combustión interna. Sin embargo, no es así en absoluto.

Como es obvio, los requisitos exigidos a una batería para mover una moto eléctrica a 50, 80 o 120 km/h son más altos que los necesarios para, por ejemplo, mantener encendido un teléfono móvil. Por ello, equipan celdas de litio de mayor calidad.

Cuando la batería de una moto eléctrica llega al final de su vida útil (generalmente, porque su capacidad de carga baja del 70 % de la inicial), hay que desecharla de forma adecuada. La razón es que esas celdas serán reutilizadas para alimentar dispositivos con menos requisitos. Un proceso que puede repetirse decenas de veces.

5. Se cargan durante la marcha

Esta es una característica propia de las motos eléctricas con frenada regenerativa. En concreto, lo que hacen es aprovechar la energía calorífica generada al apretar las manetas de freno y transformarla en energía eléctrica. Esto es clave para que este tipo de vehículos superen los 100 kilómetros de autonomía.

6. La autonomía de las baterías depende de la potencia del motor

Por norma general, una moto con motor de 250 cc de gasolina gasta más que una de 49 cc. Es normal. Al fin y al cabo, es más grande, ofrece mayor potencia y alcanza velocidades más altas.

Con las motos eléctricas sucede lo mismo, pero suele costarnos un poco hacernos a la idea. Esto se debe, principalmente, a que no emplean como unidad los CV de potencia, a los cuales estamos más acostumbrados.

La potencia nominal de un motor eléctrico se mide en kW de potencia. A su vez, este hace una demanda de energía a la batería que se cuantifica en kWh. Tenlo en cuenta a la hora de realizar los cálculos.

7. La autonomía se mide en kilómetros de aceleración


Otro dato curioso. Los motores de combustión interna, cuando se deja de pisar el acelerador, trabajan al ralentí. Es decir, se mantienen siempre revolucionados, aunque sea a velocidades bajas (entre 800 y 1200 rpm).

Sin embargo, esto no sucede con las motos eléctricas. En cuanto dejas de apretar el acelerador, el motor deja de pedir energía a la batería. Solo se mantiene un pequeño gasto residual, que es el derivado de mantener el cuadro de mandos y los faros encendidos. En muchos casos, este tipo de motos equipan baterías suplementarias con estas finalidades.

Por ejemplo, si echas un vistazo a cualquiera de las motos de nuestro catálogo, no tardarás en darte cuenta de que la autonomía va ligada a la velocidad. De hecho, encontrarás frases como “Autonomía máxima de 100 km circulando a 50 km/h”.

En definitiva, estos nos han parecido los datos más curiosos sobre las baterías de las motos eléctricas. De hecho, nos parecen aspectos clave que no todo el mundo conoce y que resultan imprescindibles a la hora de comprar una moto eléctrica. Esperamos haberte ayudado a comprender mejor cómo funcionan y a decidirte por el modelo ideal para ti.

Motos eléctricas en Madrid. Todo lo que deberías saber

Puntos re recarga en Madrid

Cada día, más motoristas (y no motoristas) madrileños se dan cuenta de que las motos eléctricas son su mejor alternativa de transporte. Se trata de un vehículo de dos ruedas que además no contamina y gasta menos, por lo que no debería sorprender que tenga varias ventajas sobre otras opciones más tradicionales.

Sin embargo, hay que tener en cuenta varios factores muy cruciales, como los lugares de recarga para motos eléctricas en Madrid, antes de comprar una moto de estas características. Por ejemplo, donde vives y trabajas, ¿los hay? ¿Es gratuito utilizarlos? Hoy te lo contamos todo sobre estos útiles vehículos.

¿Cuáles son las ventajas de usar motos eléctricas en Madrid?

Las motos eléctricas son una de las mejores alternativas para los madrileños que buscan un modo de transporte seguro y eficiente. Estos vehículos ofrecen numerosas ventajas en la ciudad, incluyendo su capacidad para ahorrar dinero y tiempo, así como reducir el impacto ambiental.

En Madrid, el tráfico puede ser intenso y los problemas para aparcar son constantes. Esto significa que los viajes en automóvil pueden ser lentos y frustrantes, pero con una moto eléctrica, los conductores pueden evitar atascarse en el tráfico e incluso encontrar estacionamiento fácilmente.

Por supuesto, usar motos eléctricas en Madrid tiene un impacto positivo en el medio ambiente. Los vehículos a combustión interna emiten dióxido de carbono al entorno; sin embargo, las motocicletas eléctricas no emiten emisiones directamente al aire o residuos dañinos al suelo. Tampoco hay ruidos molestos, ya que funcionan en silencio.

Paga menos con una moto eléctrica en la capital

Los beneficios financieros de conducir una moto eléctrica también deben mencionarse al hablar de sus ventajas; junto con el hecho de que no necesitan combustible, están exentas del impuesto sobre los coches tradicionales.

Esta exención fiscal reduce los costes iniciales y regulares asociados con la tenencia del vehículo, lo que hace que sea mucho más barato conducir un vehículo eléctrico comparado con un coche tradicional o una moto de gasolina.

Y por supuesto, tampoco tendrás que pagar apenas nada por combustible, por lo que el coste será aún menor.

¿Dónde puedo encontrar puntos de recarga de motos eléctricas?

De forma similar al aumento de la popularidad de los coches eléctricos, la infraestructura de recarga para motos eléctricas en Madrid se ha ido ampliando en los últimos años.

En realidad, Madrid representa más del 40% de las ventas totales de automóviles y motocicletas eléctricas e híbridas de España. Como resultado, no es de extrañar que haya tantas opciones de facturación disponibles, tanto públicas como privadas.

Mientras que algunas son accesibles desde la acera, otras están escondidas en los aparcamientos de los comercios cercanos para proporcionarte energía gratis mientras compras. Sin embargo, para utilizar algunas de las estaciones de carga de motos eléctricas de Madrid, los usuarios deben ser miembros de un programa de suscripción específico o poseer una tarjeta de carga exclusiva.

A día de hoy, se calcula que hay más de 2.400 conectores repartidos entre las más de 800 estaciones de carga de Madrid. Estos pueden ser de los siguientes tipos:

Puntos de categoría 2. Los puntos tradicionales o Mennekes son los más utilizados. Tienen un proceso de carga más lento, tardando hasta 10 horas en cargar completamente un automóvil. Si sabes que vas a necesitar cargar mientras viajas, es mejor invertir en cargadores más rápidos o hacerlo primero en casa. Para una moto, sin embargo, puede ser suficiente.

– Enchufes y tomas Schuko. Son idénticos a los enchufes de pared que utilizas para alimentar tu teléfono, portátil u otro dispositivo electrónico en casa. Funcionan muy bien para cargar motos eléctricas, pero son demasiado lentos para los automóviles.

CCS. Estas tomas de corriente se llaman «combinadas» porque tienen una combinación que se ha convertido en la norma en Europa. Como era de esperar, la incompatibilidad entre los distintos tipos de conectores es un problema importante cuando se trata de cargar vehículos eléctricos. Los vehículos pueden recargarse rápidamente gracias a las altas potencias de estas tomas de carga.

El CHAdeMo. Como su nombre indica, así se denominan las estaciones de carga que se adhieren a la norma de carga japonesa para VE. Como su intensidad y potencia son elevadas, puede utilizarse como estación de carga rápida para las recargas más rápidas.

¿Dónde puedes cargar gratis una moto eléctrica en Madrid?

Algunas de las estaciones de carga de Madrid para motos eléctricas requieren un pago o un abono, pero también hay lugares donde puedes cargar tu moto gratis mientras haces otra cosa, como ir de compras. Por nombrar algunos:

– Carrefour. Puedes conseguir una tarjeta en el mostrador de servicio que te dará acceso a estaciones de carga en cualquiera de los supermercados de esta cadena. Sin embargo, la energía extra es útil, aunque la carga sea lenta.

Tienda El Corte Inglés. Mientras haces la compra, también puedes enchufar tu coche eléctrico en esta tienda. La capital de España suele ofrecer cargadores lentos, semirrápidos e incluso algunos exclusivos para tipos específicos de motos eléctricas.

– Burger King. No todos los establecimientos de esta cadena ofrecen puertos de carga, aunque algunos sí. Infórmate sobre las opciones de reserva en el sitio principal si estás interesado.

– En el aeropuerto. En el Adolfo Suárez Barajas de Madrid hay más de 30 estaciones de carga gratuitas para estos vehículos.

IFEMA. Es bueno saber que, además de las opciones de recarga de pago, este centro de convenciones también ofrece recarga gratuita para los asistentes.

Cargar la moto en casa, una opción cada vez más extendida

Por si fuera poco con estas alternativas, cada vez más modelos de motos eléctricas en Madrid ofrecen la opción de extraer las baterías para poder cargarlas directamente en un enchufe en tu casa o en el trabajo.

De esta forma, ya no tienes que preocuparte ni siquiera por encontrar un punto de carga allá donde vayas, haciendo que estos cómodos vehículos eléctricos se vuelvan aún más prácticos.

En cualquier caso, con el auge de la movilidad sostenible y el aumento de la población en la capital, nuestra predicción es que en los próximos años veremos todavía más motos eléctricas en Madrid según más gente se vaya dando cuenta de las grandes ventajas de estos vehículos.

Las mejores motos eléctricas para 2023 

motor eléctrico

¿Cuáles son las mejores motos eléctricas de 2023? Sin duda, una pregunta difícil de responder, puesto que depende de cada caso. Al fin y al cabo, cada tipo de usuario tiene unas necesidades específicas. Por ello, aquí vamos a hacer un repaso por las características más demandadas durante este año según cada perfil. Así esperamos ayudarte a escoger el modelo más adecuado para ti.

Mejores motos eléctricas de 2023 para usuarios urbanos

El usuario urbano es aquel que realiza pequeños trayectos cada día en ciudad. Hablamos, por ejemplo, de ir al trabajo sin salir del municipio de residencia, de acudir al instituto o a la universidad cada mañana o de quedar con los amigos.

Hasta hace no mucho tiempo, este tipo de usuarios solía apostar por las scooters de 45 cc. Se trataba de motos de combustión interna que no superaban los 45 km/h y que se podían manejar con el permiso de circulación de ciclomotores. Actualmente, desde la incorporación de las motos eléctricas al mercado, recibe el nombre de carnet AM.

Ahora bien ¿qué características deben tener las mejores motos eléctricas de 2023 para este tipo de usuarios? Vamos a desgranarlas una a una.

Diseño compacto y espacio de almacenamiento

Son, probablemente, las dos características más importantes para los usuarios urbanos. Ellos suelen necesitar una moto pequeña y que resulte fácil tanto de manejar como de aparcar. Sin embargo, también requieren de un cajón en la parte trasera y de otro en el asiento. En estos compartimentos necesitan llevar un segundo casco y sus libros, mochilas o maletines.

Baterías extraíbles y ligeras

Debido a las características de los trayectos a realizar, las mejores motos eléctricas urbanas de 2023 no necesitan grandes baterías. Para estos usuarios es más importante que se puedan extraer y subir a casa fácilmente para proceder a su carga. Esto les permite ahorrarse la instalación de un punto de recarga. Además, en el domicilio particular siempre sale más barato el kilovatio (kW).

Esto hace que las mejores motos eléctricas de 2023 no equipen baterías excesivamente pesadas. Es cierto que esto conlleva una menor autonomía. Sin embargo, con 60-70 kilómetros este tipo de usuarios suelen tener más que suficiente.

Motor de buje

Viene instalado directamente en la rueda trasera. De hecho, a simple vista, parece una llanta, pero no lo es. Esto permite imprimir la fuerza de propulsión de forma más directa y, con ello, conseguir una mejor aceleración. Algo muy importante en ciudad, un entorno en el que los semáforos, cedas el paso, stops y pasos de peatones obligan a realizar paradas cada poco tiempo.

Mejores motos eléctricas de 2023 para usuarios mixtos

Con el término de “usuario mixto” hacemos referencia a todos aquellos que combinan desplazamientos urbanos con pequeños trayectos por carretera. Como es obvio, esto obliga a que la moto supere los 45 km/h que citamos anteriormente. Por tanto, hay que recurrir a equivalentes a las motos de 125 cc. Para conducirlas, es necesario contar con el carnet A1 o con más de 3 años de antigüedad en el carnet B.

Diseño deportivo

¿Has conducido alguna vez una scooter de 125 cc en autovía? Si la respuesta es que sí, probablemente sepas que no son excesivamente cómodas al realizar este tipo de trayectos. Te obligan a estar en una posición bastante erguida, por lo que el viento resulta más molesto.

Este es el principal motivo por el que las mejores motos eléctricas de 2023 para usuarios mixtos contarán con diseños híbridos que resulten aptos tanto para ciudad como para carretera. Un buen ejemplo nos lo ofrece la Ovaobike MCR-HUB.

Como podrás comprobar, el asiento y el manillar se colocan de forma que puedas colocarte tanto erguido como “tumbado”. De este modo, podrás adquirir la posición más adecuada para desplazarte en cualquier tipo de vía. Sus grandes espejos retrovisores te ayudarán a no perder de vista nada de lo que te rodea.

Equilibrio entre potencia y velocidad

Otra característica de las mejores motos eléctricas de 2023. Sin duda, un auténtico desafío para los fabricantes, ya que alcanzar este equilibrio no es fácil. Sin embargo, los usuarios cada vez demandan más que estos vehículos les resulten cómodos en entornos urbanos y les permitan circular sin peligro en carretera.

Por todo ello, estas motos no superan los 11 kW de potencia nominal. Una cifra muy importante, ya que de ser superior obligaría a tener el carnet A2. Esto les permite, en la mayoría de los casos, alcanzar los 120 km/h. Solo tienes que echar un vistazo a la Ovaobike MCR-Mid para darte cuenta de ello.

Sin embargo, un usuario mixto no necesita en todo momento ese rendimiento. Por ello, las mejores motos eléctricas de 2023 equipan varios modos de conducción. Al menos, tres: uno ECO o City para circular por ciudad, otro Sport para moverse por vías interurbanas y autovías y un último llamado Turbo, que es el recomendado para efectuar adelantamientos en carretera.

Baterías con mucha autonomía, pero que también sean portátiles

Generalmente, los usuarios mixtos realizan desplazamientos diarios que, con facilidad, se van a los 40-50 kilómetros diarios. Sin embargo, no todos ellos suponen el mismo consumo de batería. Como es obvio, el motor no hace la misma demanda energética circulando a 50 km/h que a 120 km/h.

En este sentido, los modos de conducción que citamos anteriormente como característica indispensable de las mejores motos eléctricas de 2023 también juegan un papel clave. Gracias a ellos, el usuario tiene la posibilidad de sacar el máximo partido a su batería. De este modo, la autonomía puede superar los 200 kilómetros en ciudad y los 100 kilómetros en carretera.

Mejores motos eléctricas de 2023 para grandes desplazamientos

Este tipo de motos eléctricas están pensadas para personas que, principalmente, acometen desplazamientos por carretera. Por ejemplo, para quienes tienen que desplazarse a otro municipio a diario para ir a trabajar. Generalmente, para poder conducirlas es necesario contar con el carnet de conducir A2 o A, según la potencia entregada por el motor. En cualquier caso, las mejores deben cumplir con una serie de características técnicas imprescindibles.

Máxima potencia y velocidad

Para circular con seguridad en autopista y autovía, las mejores motos eléctricas de 2023 deben alcanzar con facilidad los 100-120 km/h. No hacerlo puede entrañar un riesgo para la seguridad del propio conductor y para la de aquellos que le acompañan en la carretera.

Un buen ejemplo de moto eléctrica que cumple con este requisito es nuestra Ovaobike MCR-S. Su motor es capaz de ofrecer hasta 22 kW de potencia. Esto se traduce en que, en modo Sport, sea capaz de alcanzar los 128 km/h. Cifra por encima del límite legal, pero que brinda la tranquilidad de saber que no está entregando lo mejor de sí de forma constante al circular dentro de él.

motos eléctricas enero 2023

Sin embargo, lo que más sorprende es la aceleración. Este modelo es capaz de pasar de 0 a 100 km/h en solo 8 segundos. Por tanto, cada vez que te enfrentes a una incorporación no volverás a sentir que te quedas atrás. Una cifra que la sitúa por méritos propios entre las mejores motos eléctricas de 2023 y de toda la historia.

Frenada regenerativa

Como resulta obvio, las mejores motos eléctricas de 2023 para este tipo de desplazamientos deben ser capaces de recorrer largas distancias. En muchos casos, superiores a los 80-100 kilómetros diarios. Pero ¿cómo conseguir una autonomía suficiente sin elevar el peso del vehículo mediante la instalación de grandes baterías? La respuesta nos la ofrece el sistema de frenada regenerativa.

Esta tecnología es una demanda cada vez más habitual entre los compradores de motos eléctricas. En concreto, lo que hace es aprovechar la energía generada entre el disco y la pastilla de freno para recargar la batería. Algo que es posible gracias a un sencillo sistema de conversión.

De este modo, las mejores motos eléctricas de 2023 son capaces de incrementar notablemente su autonomía. Depende del caso, pero el porcentaje puede llegar a ser de hasta el 40 %. Sin duda, una característica muy útil.

La mejor moto eléctrica de 2023 está al alcance de tu mano

En definitiva, estas son las características más solicitadas en las mejores motos eléctricas de 2023. Todo depende, claro está, del tipo de usuario para el que están enfocadas. Estamos convencidos de que, tras haber leído este artículo, sabes en qué debes fijarte a la hora de comprar la tuya.

¡Ha llegado el momento de dar el salto a la movilidad sostenible!

¿Cuánto cuesta una moto eléctrica deportiva?

precio moto eléctrica

El precio motos eléctricas depende de muchos factores, sobre todo, cuando hablamos de modelos deportivos. El tipo de motor, la capacidad de la batería o el sistema de carga son algunos de ellos. Con el propósito de que puedas hacerte una idea relativamente fiel a la realidad, en Ovaobike queremos hablarte de ellos.

El tipo de motor, un factor clave en el precio motos eléctricas

El primer aspecto que debemos tener en cuenta a la hora de determinar el precio motos eléctricas es el tipo de motor equipado. Por si no lo sabías, en el mercado hay dos disponibles: el motor de tipo buje y el motor eléctrico central. Cada uno de ellos tiene sus propias características, las cuales vamos a explicar a continuación.

El motor eléctrico de tipo buje

El motor eléctrico tipo buje no se coloca en la estructura de la moto, sino en su rueda trasera. Tiene forma de plato y, a simple vista, parece una llanta sin radios. Aplica la fuerza de propulsión directamente sobre el neumático a partir de la energía que le suministra la batería del vehículo.

Motor de las motos eléctricas de gran potencia

Sin duda, este es el tipo de motor más sencillo y económico de todos. De hecho, en comparación con el motor eléctrico central que veremos a continuación, resulta mucho más simple en todos los sentidos, lo que se traduce en un menor mantenimiento a corto y largo plazo. Esto hace que el precio motos eléctricas que lo equipan sea bastante más económico.

El único inconveniente es que este tipo de motores no pueden aplicar tanta fuerza de propulsión como los centrales. De hecho, se utilizan exclusivamente en motos eléctricas cuya potencia es inferior a su equivalente de 125 cc en motores de combustión. Un buen ejemplo nos lo ofrece la Ovaobike MCR-HUB. Cuenta con una estética eminentemente deportiva, pero su potencia es la más baja de todos los modelos de nuestro catálogo.

El motor eléctrico central

El motor eléctrico central es mucho más complejo en términos mecánicos que el de tipo buje, lo que encarece el precio motos eléctricas que lo usan. De hecho, requiere de que el diseño del vehículo tenga una configuración específica para hacerle hueco en la estructura. Sin embargo, es capaz de realizar una entrega de potencia muy superior, por lo que resulta más adecuado para las motos eléctricas deportivas.

Dentro del catálogo de Ovaobike podemos encontrar dos modelos con este tipo de motor. Hablamos, cómo no, de la Ovaobike MCR-Mid y de la Ovaobike MCR-S. Respectivamente, son capaces de alcanzar los 130 km/h y los 148 km/h. Como es obvio, los motores eléctricos centrales son los utilizados en motos eléctricas equivalentes a 125 cc y cilindradas superiores.

Al contrario que en el caso anterior, los motores centrales eléctricos requieren de un sistema de transmisión que logre llevar la fuerza de propulsión a la rueda trasera. Este es idéntico al empleado en las motos de combustión interna. Al tratarse de varios componentes más, el precio motos eléctricas que lo usan es sensiblemente superior.

La potencia del motor

Otro factor que influye notablemente en el precio motos eléctricas. Como es obvio, cuanto más elevada sea la potencia ofrecida, más alto será el valor del vehículo. Pero ¿cómo determinar la potencia de este tipo de motores? A poco que hayas echado un vistazo a nuestro catálogo, ya te habrás dado cuenta de que la unidad utilizada para medirla es el kW. Una unidad diferente al CV con el que estamos familiarizados al hablar de motos de combustión interna.

Realizar la conversión es muy fácil. En concreto, 1 kW en un motor eléctrico equivale a 1,34 CV en un motor de combustión interna. Por ejemplo, un modelo como la Ovaobike MCR-S, que alcanza los 22 kW de potencia, ofrecerá la misma potencia que un motor de gasolina de 29,5 CV.

Este tipo de motos se pueden conducir con el carnet A2 (potencias inferiores a 47 CV). Es el que, tradicionalmente, ha permitido pilotar motos de 125 cc. También es posible llevarlas por las carreteras españolas si se poseen más de dos años de antigüedad en el carnet B.

Más información sobre tipos de carnet necesarios aquí.

El tipo de batería

La batería es el elemento responsable de proporcionar energía al motor y de garantizar una determinada autonomía medida en kilómetros. Por ello, es otro de los elementos que marca en mayor medida el precio motos eléctricas. Sin embargo, aunque actualmente se fabrican con celdas de litio, no todas son iguales. Podemos diferenciar dos tipos.

batería de las motos eléctricas de gran potencia MCR-S

Baterías extraíbles

La opción más cómoda. En este caso, la batería no se encuentra integrada en la estructura, sino que posee un compartimento propio. De él se puede sacar para ser llevada al hogar, en el cual puede procederse a su recarga mediante un enchufe convencional. Esto brinda la posibilidad también de llevar una de repuesto con el propósito de incrementar el número de kilómetros de autonomía.

Sin embargo, para poder transportar hasta casa este tipo de baterías, los fabricantes necesitan hacerlas pequeñas. Esto afecta a su autonomía, que suele ser bastante inferior respecto a aquellos modelos que las tienen integradas. También son más económicas.

En cualquier caso, las baterías extraíbles son las preferidas de la mayoría de usuarios. Sobre todo, cuando no poseen un punto de carga en su garaje o cerca de casa. No solo hacen que el precio motos eléctricas sea inferior, sino que también suprimen la necesidad de instalar este elemento y permiten pagar menos por cada kW.

Baterías integradas

Son similares a las instaladas en la mayoría de coches eléctricos. Tienen una capacidad muy superior y, por tanto, resultan mucho más grandes y pesadas. Esto hace que no se puedan extraer de la estructura de la moto. Para proceder a su carga, es necesario usar una estación pública o privada compatible.

Evidentemente, el precio motos eléctricas que usan este tipo de baterías es superior. Al fin y al cabo, ofrecen mucha más autonomía y son capaces de alimentar motores de gran potencia. Este es el motivo por el que suelen ser las elegidas en los modelos más deportivos.

La capacidad y el sistema de carga de la batería

La capacidad de la batería también define en gran medida el precio motos eléctricas. Este factor se mide en kilovatios hora (kWh). Cuanto mayor sea, más kilómetros permitirá recorrer, aunque para determinarlo también hace falta conocer la potencia del motor. Por ejemplo, la Ovaobike MCR-Mid, que cuenta con un motor de 10,5 kW y una batería de 9,6 kWh, puede recorrer 230 kilómetros a 50 km/h.

cargar moto eléctrica

Pero hay otro aspecto ligado a las baterías que también define en gran medida el precio motos eléctricas. Hablamos, cómo no, del sistema de carga. Cuanto más rápido sea, más elevado será el valor de este componente. Todos nuestros modelos alcanzan el 80 % de su capacidad en un plazo de, aproximadamente, 3 horas.

Otros aspectos que influyen en el precio motos eléctricas

Es indudable que el precio motos eléctricas viene marcado, principalmente, por sus motores y baterías. Especialmente, cuando hablamos de modelos deportivos. Sin embargo, no son los únicos factores a considerar. También debemos citar:

  • Sistemas de frenada regenerativa. Son aquellos que permiten recargar la autonomía de la batería aprovechando la energía generada por la moto al frenar.
  • Calidad de los materiales y acabados. Evidentemente, el uso de materiales premium se va a ver reflejado en el precio.
  • Calidad de los componentes. Suspensiones, sistemas de freno y transmisión, guardabarros… El uso de piezas de la máxima calidad también va a influir sensiblemente en el valor final de la moto deportiva.

Entonces ¿cuánto vale una moto eléctrica deportiva?

Como es obvio, no podemos dar cifras exactas más allá de los modelos que forman parte de nuestro catálogo. Al fin y al cabo, cada marca tiene sus propios criterios y fija sus precios en base a estos factores y muchos otros que no tienen que ver con la propia moto.

Dicho esto, la moto eléctrica deportiva MCR-Hub está disponible por 10.890 euros. En cambio, la MCR-Mid, que es equivalente a una moto de 125 cc, se puede adquirir por 14.890 euros. Finalmente, puedes hacerte con nuestra moto eléctrica deportiva con mayor potencia, que es la MCR-S, por 15.890 euros.

Eso sí, a la hora de determinar el precio motos eléctricas, debes tener en cuenta también si puedes acogerte al Plan MOVES III. En caso de poder hacerlo, el valor se verá reducido considerablemente. Incluso si hablamos de modelos tan deportivos como los que componen nuestro catálogo.

Puntos de recarga para motos eléctricas

cargar moto eléctrica

A todos los que se deciden por pasarse a la movilidad eléctrica les surge la misma pregunta: ¿cómo funcionan las gasolineras eléctricas y dónde puedo encontrarlas?

Es normal. Al fin y al cabo, se trata de una tecnología relativamente y muchos de nosotros no hemos tenido nunca un vehículo de este tipo. Por ello, aquí queremos hablarte en profundidad acerca de los puntos de recarga para motos eléctricas.

¿Qué son los puntos de recarga para motos eléctricas?

Antes de nada, debemos definir exactamente este concepto. Los puntos de recarga para motos eléctricas son, fundamentalmente, dispositivos diseñados para recargar las baterías empleadas por este tipo de vehículos para alimentar sus motores. Están formados por:

  • Una estructura de tipo rectangular y que alcanza, aproximadamente, los 120-150 cm de alto.
  • Una pantalla táctil o acompañada de un display físico que permite seleccionar el tipo de carga y la potencia.
  • Un lector de tarjetas de crédito y débito para efectuar el pago o cualquier otro sistema similar.
  • Una manguera de gran longitud en cuyo extremo se sitúa el conector de carga de la batería.

Sin duda, ni la apariencia ni el modo de funcionamiento de los puntos de recarga para motos eléctricas es muy diferente del ofrecido por un surtidor de gasolina, diésel o cualquier otro derivado del petróleo similar.

¿Dónde puedo encontrar puntos de recarga para motos eléctricas?

Por suerte, los puntos de recarga para motos eléctricas son cada vez más habituales en España. De hecho, tanto los organismos públicos de movilidad como las empresas privadas están haciendo una fuerte inversión con el propósito de incrementar su número ante el crecimiento de vehículos electrificados en nuestras carreteras.

En este sentido, debemos diferenciar entre:

  • Gasolineras eléctricas. También llamadas electrolineras. De hecho, suelen ocupar un espacio importante dentro de estaciones de servicio que también venden combustibles fósiles. Generalmente, incluyen áreas de descanso con el propósito de que los conductores puedan estar ocupados durante todo el tiempo que sea necesario para restaurar la capacidad de la batería.
  • Puntos de carga públicos. Se encuentran en mitad de la calle. Especialmente, en áreas de estacionamiento para vehículos. Las plazas situadas junto a ellos quedan reservadas para vehículos electrificados por razones evidentes.
  • Puntos de carga privados. Son aquellos que se instalan en los hogares. Sobre todo, en los garajes, que son los lugares en los que este tipo de vehículos pasan más horas. Así es posible, por ejemplo, recargar sus baterías durante la noche.

Ahora bien, la mayoría de las motos eléctricas ofrecen una ventaja adicional respecto a los coches electrificados. Hablamos, cómo no, de que sus baterías son extraíbles. Esto quiere decir que, al terminar la jornada, puedes extraerla y subirla a casa para realizar su recarga dentro de tu propio hogar. De hecho, emplean cargadores similares a los de un teléfono móvil, por lo que no requerirás de ningún acople o conexión especial. Tan solo tendrás que enchufarlo a la red eléctrica doméstica.

Sin embargo, también es posible restaurar su autonomía utilizando puntos de recarga para motos eléctricas como los que hemos comentado anteriormente. Es decir, si quieres afrontar un viaje largo, podrás programar paradas en gasolineras eléctricas para no quedarte nunca sin batería. O, incluso, llevar una de repuesto en el cajón de carga.

Sistemas disponibles en las gasolineras eléctricas y los puntos de recarga

Puede que pienses que todos los puntos de recarga para motos eléctricas funcionan del mismo modo. Sin embargo, estás equivocado. Cada uno tiene sus propias peculiaridades, las cuales se traducen, principalmente, en tiempos de carga más elevados o reducidos.

Teniendo en cuenta este criterio, podemos hablar de cuatro tipos de puntos de recarga para motos eléctricas:

  • Carga lenta o normal. Este sistema es el que utilizarás si apuestas por una moto eléctrica cuya batería se pueda extraer con el propósito de cargarla en tu hogar. Piensa que, en su interior, lo normal es que cuentes con una instalación monofásica, la cual te ofrecerá una potencia de entre 2,3 kW y 7,4 kW (dependerá de la que hayas contratado con tu suministrador). Por ejemplo, si la batería de tu moto tiene 30 kW de capacidad, tardarías entre 4 y 13 horas en restaurar su autonomía por completo.
  • Carga semi-rápida. En este caso, la potencia ofrecida suele alcanzar los 22 kW. Esto es posible, fundamentalmente, a que funcionan mediante una instalación trifásica. Volviendo al ejemplo de una batería de 30 kW, restaurarías su capacidad al completo en menos de una hora y media. Este es el sistema que encontrarás con mayor asiduidad en los puntos de carga públicos citados anteriormente.
  • Carga rápida. Solo disponible en las gasolineras eléctricas. Brindan una potencia que oscila entre los 40 kW y los 50 kW, según el caso. Para hacerte una idea, en unos 45 minutos podrás cargar por completo una batería de 30 kW.
  • Carga ultra-rápida. Lo último en tecnología. El único problema que tiene este tipo de puntos de recarga para motos eléctricas es que aún no son compatibles con muchos modelos. Llegan a los 350 kW de potencia, lo que permite cargar una batería de 30 kW en menos de 10 minutos.

Un apunte. Las motos eléctricas, sobre todo cuando cuentan con baterías extraíbles, poseen una mecánica mucho más sencilla que los coches eléctricos e híbridos. La prueba es que se pueden cargar mediante un enchufe convencional. Esto hace que, en la mayoría de los casos, no sean compatibles con los sistemas de carga rápida y ultra-rápida. Utilizarlos podría provocar un deterioro grave e inmediato de este componente.

Puntos de recarga para motos eléctricas en tu ciudad

Toda la información a la que hemos hecho referencia anteriormente te será muy útil si tienes pensado comprar una moto eléctrica. Sin embargo, seguro que, llegado a este punto, te preguntas dónde puedes encontrar gasolineras eléctricas y puntos de recarga públicos. Te lo contamos.

Puntos de recarga para motos eléctricas en Madrid 

En primer lugar, tenemos que hablar de la capital de España. ¿El motivo? Actualmente, posee la mayor infraestructura de puntos de carga para motos eléctricas de todo el país. Su gestión es de la Subdirección General de Energía y Cambio Climático.

En total, hay más de 50 puntos de carga de este tipo repartidos por la capital. Por ejemplo, es posible encontrarlos en las calles Ibiza, San Bernardo o Velázquez, por ejemplo. Además, los hay de carácter público y privado, así como de carga monofásica (2,3 kW) y rápida (50 kW). 

Especial mención merecen aquellos situados en los aparcamientos de rotación y que son ofrecidos por la Empresa Municipal de Transportes (EMT). Por ejemplo, podrás cargar la batería de tu moto en los situados en la plaza del Marqués de Salamanca, en el de la calle Hiedra o en el de la plaza de Colón.

Puntos de recarga para motos eléctricas en Barcelona

Actualmente, dentro de la ciudad de Barcelona hay más de 450 puntos de carga para vehículos eléctricos. 150 de ellos están dedicados en exclusiva a las motos. Cada uno da cobertura simultáneamente, al menos, a 8 motos eléctricas.

Esto es especialmente importante, ya que Barcelona es la ciudad española en la que más se utiliza la moto como medio de transporte. El servicio municipal está gestionado por Endolla Barcelona y se puede usar fácilmente registrándote como usuario en la aplicación móvil Smou. Sus puntos de carga están presentes tanto en aparcamientos subterráneos como en superficie.

cargar moto eléctrica
Puntos de recarga Endolla’t en Barcelona

Además, esta aplicación cuenta con un sistema de localización mediante mapas que te permitirá saber dónde se encuentran las gasolineras eléctricas más próximas a tu ubicación. Algunos ejemplos son las situadas en el Carrer de la Llacuna 147 y en la calle Provença 449. Todos ellos están disponibles durante las 24 horas del día.

Puntos de recarga para motos eléctricas en Valencia

Es cierto que, actualmente, Valencia no se puede comparar a Madrid o Barcelona en términos de número de gasolineras eléctricas. Sin embargo, sí que es una de las que están realizando una mayor apuesta por ellas. Especial mención merece su proyecto de incorporar puntos de carga para motos eléctricas en todas las farolas de la ciudad. En las calles Amadeo de Saboya, Pintor Vilar y Conde Altea ya es posible encontrarlos.

Esto se une a una red de carga de motos eléctrica cada vez mayor. En estos momentos, la ciudad posee 124 gasolineras eléctricas de este tipo. La tendencia es igual en el resto de la provincia. Por ejemplo, en Gandía es posible encontrar 25, mientras que en Cullera hay 20 y en Sagunto otras 15. Paterna (12), Torrent (10) y Xàtiva (8) son otros buenos ejemplos de esto.

Más información sobre los puntos de recarga disponibles en Valencia.

Puntos de recarga para motos eléctricas en otras ciudades españolas

Hoy en día, todas las ciudades españolas cuentan con gasolineras eléctricas. Sin embargo, algunas de ellas tienen más que otras. Es el caso, por ejemplo, de Alicante (595), Girona (369) y Málaga (336). Así que no importa dónde vivas si decides comprarte una moto eléctrica. Siempre tendrás al alcance de tu mano un punto en el que recargar su batería.

¿Cuánto cuesta recargar la batería de una moto eléctrica?

Sin duda, se trata de una pregunta difícil de responder, ya que cada sistema de carga tiene sus propias tarifas. Además, existe cierta flexibilidad a la hora de fijar el precio del kWh, al igual que sucede con la gasolina y demás combustibles fósiles.

Generalmente, la opción más lenta es la más económica. Por ejemplo, cargar una batería de 30 kWh usando la red eléctrica doméstica de tu hogar te costará, de media, unos 3,50 €. En cambio, si vas a un punto de carga, te saldrá algo más caro.

Por ejemplo, los cargadores que utilizan este mismo sistema monofásico suelen cobrar en torno a 0,30 €/kWh, por lo que recargar una batería de 30 kWh te costaría unos 9 euros. Generalmente, los sistemas de carga semi-rápida aplican las mismas tarifas o, al menos, unas muy similares.

Por su parte, si utilizas sistemas de carga rápida o ultra-rápida, deberás estar dispuesto a pagar entre 12 y 15 euros por la misma cantidad de energía. Generalmente, sus precios oscilan entre los 0,40 €/kWh y los 0,45 €/kWh.

En definitiva, esto es todo lo que debes saber sobre las gasolineras eléctricas y los puntos de carga para motos eléctricas. Esperamos haberte ayudado a comprender cómo funcionan, qué tipos existen y dónde las puedes encontrar

¿Qué carnet necesito para conducir una moto eléctrica?

carnet moto eléctrica

¿Cuál es el carnet de conducir para motos eléctricas? Estamos seguros de que, si estás decidido a deshacerte de tu vieja moto para pasarte a un modelo de movilidad más sostenible y eficiente, esta pregunta se te ha pasado por la cabeza. No te preocupes. Aquí queremos explicarte todo lo que debes saber al respecto.

¿Qué dice la ley sobre el carnet de conducir motos eléctricas?

Evidentemente, cuando el Reglamento General de Conductores (Real Decreto 818/2009, de 8 de mayo) fue publicado, en España no había motos eléctricas en circulación. Sin embargo, con el paso de los años, su número se ha incrementado de forma muy notable. Tanto es así que, a lo largo de los últimos años, este texto legal, el cual regula los tipos de carnets necesarios para conducir cualquier vehículo sobre las carreteras españolas, ha necesitado actualizarse repetidamente.

La última actualización tuvo lugar el 25 de febrero de 2021 e hizo especial hincapié en la movilidad eléctrica. Al fin y al cabo, los motores eléctricos no funcionan del mismo modo que los de gasolina y, además, no expresan su potencia de igual forma. Por ejemplo, su volumen no se mide en centímetros cúbicos, como tampoco su rendimiento se expresa en CV (se utilizan kW).

Tipos de carnet de conducir motos eléctricas

Evidentemente, no existe un solo tipo de carnet de conducir motos eléctricas, puesto que el mercado cuenta con una gran variedad de modelos de diferente tamaño y potencia. En total, la DGT indica que hay cuatro licencias diferentes según estos criterios: AM, A1, A2 y A.

Permiso AM

Es el carnet de conducir motos eléctricas básico. Lo puede obtener cualquier persona una vez que cumpla los 15 años de edad y brinda la posibilidad de circular por las carreteras españolas con ciclomotores eléctricos. Hacemos referencia, cómo no, a vehículos de este tipo que no superen los 45 km/h. Quienes apuesten por esta opción no podrán llevar consigo a pasajeros hasta cumplir los 18 años.

Permiso A1

Aquí ya hablamos de un carnet de conducir motos eléctricas que solo puede obtenerse una vez cumplidos los 16 años. En concreto, habilita para ponerse a los mandos de motocicletas con una capacidad máxima de carga de 150 kg y motores con una cilindrada de entre 45 cc y 125 cc.

Como dijimos antes, los motores eléctricos no utilizan esta unidad de medida, por lo que debemos fijarnos en la potencia. En este sentido, la DGT fija el tope en 14,75 CV, lo que equivale a 11 kW.

Permiso B

En este punto nos encontramos ante una excepción que queremos comentar. En concreto, el permiso de clase B hace referencia a coches cuya MMA (masa máxima autorizada) no supere los 3.500 kg y para el transporte de un máximo de 8 pasajeros más allá del propio conductor.

Sin embargo, la DGT indica que, una vez acumulados tres años de antigüedad en este permiso, el titular puede circular con motos de hasta 125 cc y 14,75 CV (11 kW) sin necesidad de obtener el carnet de conducir motos eléctricas A1. Eso sí, si te decantas por esta opción, tendrás que esperar, como mínimo, a cumplir los 21 años para conducirlas.

Permiso A2

Este carnet de conducir motos eléctricas te brindará la posibilidad de manejar vehículos cuya potencia máxima no supere los 47 CV, es decir, los 35 kW. Para poder obtenerlo, tendrás que haber cumplido los 18 años.

Permiso A

El permiso A te permitirá conducir sin restricciones todo tipo de motos eléctricas. Para poder obtenerlo, es necesario que hayas cumplido los 20 años de edad y que cuentes con, al menos, dos años de antigüedad en el permiso A2.

Sin duda, este es el carnet de conducir motos eléctricas más difícil de obtener, pero también el que te brindará más posibilidades a la hora de comprar un vehículo de este tipo. Para obtenerlo, es obligatorio que superes un curso teórico general y su pertinente examen. Además, tendrás que enfrentarte a una prueba en circuito cerrado y a otra en la calle sobre una moto de gran potencia (600 cc o más).

¿Es posible conducir una moto eléctrica sin carnet?

La respuesta es que no. Esta es una duda que poseen muchos conductores debido, fundamentalmente, a que hay otros vehículos eléctricos que sí pueden llevarse por la calle sin carnet. Es el caso, por ejemplo, de los patinetes o de las bicicletas eléctricas.

Sin embargo, ninguno de ellos tiene la consideración de vehículos para la DGT, mientras que las motos eléctricas sí. Esto hace que, por ejemplo, no puedan exceder los 25 km/h o que solo puedan circular por carretera en caso de no haber carriles bici o vías similares especialmente habilitadas para ellos.

¿Qué carnet de conducir motos eléctricas necesitas para llevar una Ovaobike?

Sin duda, se trata de una cuestión muy importante a la hora de elegir la moto eléctrica Ovaobike que mejor encaja con tus necesidades y gustos. Vamos a analizar nuestros tres modelos actuales y a explicarte qué carnet de conducir motos eléctricas necesitas en cada caso.

Ovaobike MCR-H

Se trata de nuestra moto eléctrica más pequeña y versátil. De hecho, está pensada para trayectos realizados principalmente en ciudad, lo que queda patente en sus más de 100 kilómetros de autonomía circulando a 50 km/h. Sin embargo, también ofrece un buen rendimiento en carretera.

En concreto, la Ovaobike MCR-H ofrece una potencia de 7 kW y alcanza una velocidad máxima de entre 99 y 105 km/h, en función de si activas el modo Turbo o no. En cualquier caso, estas características hacen que, para poder conducirla, necesites el carnet de clase A1 o, en su defecto, el permiso de clase B con más de 3 años de antigüedad.

Ovaobike MCR-M

La Ovaobike MCR-H es una moto eléctrica de tamaño medio capaz de satisfacer tus necesidades tanto a la hora de circular por ciudad como por carretera. Esto es posible, fundamentalmente, gracias a su motor de 11 kW, que permite alcanzar los 120-130 km/h (en función, como dijimos antes, de si activas el modo Turbo o no). Unas características que la asemejan mucho a una moto de 125 cc, si bien es cierto que provista de una estética y un rendimiento más deportivo.

Estas características, unidas a su batería de hasta 230 kilómetros de autonomía circulando a 50 km/h, hacen indispensable poseer el carnet de conducir motos eléctricos de tipo A1 o B con tres años o más de antigüedad. Es decir, los mismos que para el modelo anterior.

Ovaobike MCR-S

Nuestra moto eléctrica más potente. Esto queda patente en su motor, que alcanza los 22 kW de potencia y cuyo rendimiento está fuera de toda duda. Para que te hagas una idea, permite circular a 126 km/h activando el modo Sport y a 148 km/h si accionas el Turbo. Velocidades que están por encima de lo permitido, pero que son la mejor garantía de que podrás ir a 120 km/h sin la sensación de que el vehículo está realizando un sobreesfuerzo.

Pero ¿qué carnet de conducir motos eléctricas necesitas para ponerte a los mandos de la Ovaobike MCR-S? En concreto, deberás contar con el permiso de clase A2, que te faculta para llevar vehículos eléctricos de dos ruedas de hasta 35 kW. Como es obvio, también te servirá el carnet A.

Consigue el carnet de conducir motos eléctricas y siente el placer de pilotar una Ovaobike

En definitiva, hay hasta cinco carnet de conducir motos eléctricas que te permitirán ponerte a los mandos de cualquiera de los tres modelos de Ovaobike. Unos vehículos dotados de una estética deportiva y moderna, de una gran autonomía y de motores potentes que garantizan un rendimiento óptimo tanto en ciudad como en carretera. ¿A qué estás esperando exactamente para probarlas y elegir la que mejor se ajusta a tus necesidades de uso?

El Motor de una moto eléctrica

motor eléctrico

El funcionamiento de un motor eléctrico es mucho más sencillo que el de uno de combustión. Esto es algo curioso, sobre todo, teniendo en cuenta que son capaces de ofrecer las mismas prestaciones y que es una tecnología mucho menos extendida. Por ello, en Ovaobike queremos contarte cómo es realmente el que equipan nuestras motos para que entiendas todo lo es capaz de ofrecerte.

Características del motor eléctrico de una moto

Todos sabemos cómo funciona un motor de combustión. De hecho, este conocimiento es obligatorio para la Dirección General de Tráfico, que incluye preguntas al respecto en todos sus exámenes de conducción. Sin embargo, cuando hacemos referencia a una moto eléctrica, el asunto no está tan claro.

Sin embargo, un motor eléctrico es extremadamente sencillo. Ni siquiera difiere mucho del equipado en un taladro o en una batidora de mano. Y con estos dispositivos seguro que estás perfectamente familiarizado.

Esta sencillez hace que resulte muy complicado que los motores eléctricos se averíen o se estropean. Piensa que, en su interior, no se produce combustión de ningún tipo, no hay aceites ni bujías, tampoco correas… Además, no generan fricción, ya que no hay piezas de metal entrando en contacto constantemente con otras. Tampoco emiten residuos de ningún tipo.

Motor de las motos eléctricas de gran potencia

Componentes fundamentales del motor eléctrico de una moto

Para entender cómo funcionan este tipo de motores y desmontar algunos mitos en torno a ellos, es necesario saber en primer lugar cuáles son sus partes. Aquí lo explicamos.

La batería

En ella se almacena el “combustible”. Entrecomillamos esta palabra puesto que la electricidad no requiere combustión, aunque cumple la función de la gasolina o el diésel, que sí requieren de este proceso para generar energía.

La mayoría de motos eléctricas, como es el caso de la Ovaobike MCR-HUB y del resto que componen nuestro catálogo, poseen una batería de iones de litio muy parecida a la de cualquier smartphone o tablet. Esto se debe a que ofrecen una gran capacidad ocupando un espacio bastante reducido. De hecho, en muchos casos, es posible extraerla para llevarla a casa y recargar su autonomía desde un enchufe convencional.

La vida útil de una batería de litio alcanza los 2000 ciclos de carga y su capacidad se mide en amperios por hora (Ah) o, en su defecto, en miliamperios por hora (mAh). En su interior alberga una serie de módulos similares estéticamente a las pilas AA que todos conocemos. Estas son las responsables de acumular la electricidad, dadas las excelentes cualidades del litio al respecto.

Uno de los mitos que aquí queremos desmontar es que las baterías de las motos eléctricas no son capaces de alimentar motores muy potentes. Nada más lejos de la realidad. Si te gusta el motociclismo, seguro que alguna vez has visto una carrera de MotoE, la Copa del Mundo de Motos Eléctricas.

Esto, además, ha ayudado a desarrollar sistemas de seguridad muy efectivos. No olvidemos que el litio es un mineral muy inestable si entra en contacto con el oxígeno y con el agua. Por ello, si existe cualquier mínimo riesgo, la moto suspenderá el suministro al motor para garantizar tu seguridad.

El inversor, conversor o controlador

Muchos expertos lo definen como el “cerebro de la moto eléctrica”. ¿El motivo? Es el elemento responsable de dosificar el paso de la energía desde la batería al motor y al resto de componentes electrónicos del vehículo (luces, intermitentes, cuadro de mandos, etc.). También transforma la corriente continua almacenada en la batería a corriente alterna, que es la utilizada por dicho motor. Lo mismo podemos decir respecto al voltaje.

Por su parte, como sucede en la eléctrica de gran potencia MCR-S, hay motos con sistemas de recuperación energética. En este caso, el inversor funciona de un modo contrario al que hemos descrito. En concreto, el motor obtiene energía durante la frenada y, a continuación, la envía a este componente para que la lleve hasta la batería, incrementando su autonomía. Es un sistema muy parecido al del KERS utilizado por los Fórmula 1.

El propio motor

En la mayoría de las motos de este tipo, el motor se sitúa en la rueda trasera de la moto eléctrica. Se conoce como motor tipo Hub y tiene forma de plato. Va anclado a la llanta y, por tanto, no requiere de correas ni cadenas para transmitir la energía que hace posible el movimiento. Algo que, como dijimos anteriormente, se traduce en una mayor sencillez mecánica, menos mantenimiento y menor riesgo de averías. Para comprobar cómo es, echa un vistazo a nuestra moto eléctrica deportiva MCR-HUB.

En estos casos, lo único que podemos encontrar son cables que llevan la energía desde la batería al inversor y desde este al motor. Sin embargo, el proceso es ligeramente diferente en aquellos motores que se sitúan en el interior del chasis. Eso sí, la base teórica sobre la que funcionan es idéntica.

La diferencia está en que, en este caso, la fuerza generada por el motor eléctrico va dirigida a un piñón de ataque, lo mismo que sucede en las motos convencionales. Por tanto, en este caso, sí que es necesario el uso de correas y cadenas.

motor eléctrico

Pero ¿cómo funciona exactamente un motor eléctrico? Para entenderlo, hay que hablar de los dos principales elementos que lo forman:

  • Estátor. Es la pieza circular del motor. Es fija y se presenta envuelta en una bobina de cobre. Cuenta con diferentes secciones colocadas unas frente a otras de manera diametral. Cada una de ellas tiene una determinada polaridad (positiva o negativa).
  • Rotor. Es la pieza que gira, como da a entender su nombre. Se sitúa en la parte central del motor.

Cuando la electricidad llega al motor desde la batería, las diferentes secciones del estátor se cargan de energía. Esto hace reaccionar al rotor mediante magnetismo. Al estar unido a la llanta, gira con él y la moto avanza. Evidentemente, cuanto más rápido se carguen dichas secciones del estátor, más rápido girará el rotor y con mayor velocidad circulará la moto.

Evidentemente, esta es una explicación simplificada, ya que dentro de un motor eléctrico hay una serie de sensores que se ocupan de regular el movimiento del rotor y de la rueda. Sin embargo, con esto es suficiente para entender en qué consiste.

El par motor

Es otro aspecto importante dentro del funcionamiento de un motor eléctrico dentro de una moto. Debido a las características de este tipo de vehículos, es posible alcanzar el par máximo desde el primer instante. Algo que no sucede en las motos de combustión, que necesitan alcanzar primero un determinado número de revoluciones. Este es el motivo por el que las motos eléctricas aceleran de forma tan rápida.

Esto se traduce en otra ventaja: las motos eléctricas no cuentan con sistemas de cambio de marcha, lo que te ahorrará otro componente dado a averías. ¿El motivo? No lo necesitan. Eso sí, no es raro que los modelos que incluyen el motor eléctrico dentro del chasis puedan jugar con el par motor, pero es más difícil en aquellas que lo tienen en la rueda trasera.

¿Cómo se mide la potencia de un motor eléctrico?

Esta es, sin duda, una de las cuestiones que más te preocupará si estás pensando en comprarte una moto eléctrica. Y es que, a poco que hayas echado un vistazo a nuestro catálogo, te habrás dado cuenta de que la potencia de un motor eléctrico no se mide en CV, sino en kW.

Sin embargo, pasar de una unidad a otra es muy simple si sabes que 1 CV equivale a 0,7457 kW. Por ejemplo, la Ovaobike MCR-S cuenta con un motor eléctrico capaz de ofrecer 22 kW de potencia a través de su modo turbo. Esta cifra es equivalente a 29,50 CV en una moto de combustión interna. Para que te hagas una idea, este modelo es capaz de alcanzar los 148 kilómetros por hora. Cifra más que suficiente para circular tanto por ciudad como por carretera con total soltura.

Si pones el foco en la moto 125 MCR-Mid, te encontrarás con un motor eléctrico de 17 kW, es decir, de 22,8 CV de potencia. En este caso, su velocidad máxima se sitúa en los 130 kilómetros por hora. Nuestro modelo más pequeño, el Ovaobike MCR-HUB, alcanza los 9,1 kW (12,20 CV) y llega a los 105 kilómetros por hora.

Un motor eléctrico solo ofrece ventajas

Queda claro, tras todo lo que hemos comentado, que un motor eléctrico ofrece muchas ventajas respecto a uno de combustión interna. Tiene una mecánica mucho más simple y, por tanto, requiere de menos mantenimiento y es menos propenso a sufrir averías. Además, utiliza un combustible mucho más económico y sus baterías se pueden recargar en casa cómodamente. A todo esto hay que sumar que no contaminan, no generan ruido y aceleran mucho más rápido.

Dicho esto, no se nos ocurre ningún motivo por el que, si estás pensando en comprarte una moto, no optes por un modelo eléctrico. En Ovoabike ponemos a tu disposición tres motos diferentes según tus necesidades de uso. Todas ellas ofrecen un comportamiento excelente tanto en ciudad como en carretera.